“Have a blessed Christmas, a wonderful New Year, and go out and make music in the heart of the world,” Episcopal Church Presiding Bishop and Primate Michael Curry said in his Christmas Message 2017.

The text of the Presiding Bishop’s message follows:

  Presiding Bishop Michael Curry

Christmas Message 2017

In 2 Corinthians, the Apostle Paul says,

If anyone is in Christ, there is a new creation. The old has passed away, behold, the new is come.

At a point in that passage, St. Paul says, “God was in Christ, reconciling the world to Himself,” and he also says at another point in the same passage, “and we have been given the ministry of reconciliation.” 

Have you ever gone to the movies or read a story or a novel, and the novel starts with the end, so you know where the story ends, but then the rest of the story or the novel is actually the story behind the story. We know about Christmas. We know about Mary.  We know about Joseph. We know about the angels singing Gloria in excelsis deo. We know from our childhood the animals in the stable. We know of the magi who come from afar, arriving around Epiphany, bearing gifts of gold, frankincense and myrrh. We know of the angels singing in the heavens, and the star that shown above them.  Therein is the story. 

But the story behind the story is what St. Paul was talking about. God was in Christ reconciling the world to himself, and Jesus has now given us that same ministry of reconciliation. God was reconciling the world to himself by becoming one of us. The divine became human. God entered history. Eternity became part of time. God was reconciling the world to himself by actually living it himself. In Jesus, God came among us to show us the way, to be reconciled with the God who has created us all and everything that is. And God has likewise come in the person of Jesus, to show us how to be reconciled with each other, as children of the one God who is the Creator of us all.  That’s the story behind Christmas.

God is showing us the Way to become God’s children, and as God’s children, brothers and sisters of each other. God is showing us in Jesus how to become God’s family and how to change, and build, and make a world where everybody is a part of that family. Where children don’t go to bed hungry. Where no one has to be lonely. Where justice is real for all and where love is the ultimate law.

Know there is a story behind the story, and it’s a story worth singing about, and giving thanks for, and then living.

One of my favorite writers, the late Howard Thurman, composed a poem many years ago about Christmas, and he says it probably better than I:

     When the song of the angels is stilled,

     When the star in the sky is gone,

     When the kings and the princes are home,

     When the shepherds are back with their flocks,

     Then the work of Christmas begins:

     To find the lost,

     To heal the broken,

     To feed the hungry,

     To release the prisoner,

     To rebuild the nations,

     To bring peace to others,

     And alas, to make music in the heart.

The story behind the story is that God so loved the world, and so loves you, and so loves me.

Have a blessed Christmas, a wonderful New Year, and go out and make music in the heart of the world.

The Most Rev. Michael B. Curry

Presiding Bishop and Primate

The Episcopal Church

Mensaje de Navidad 2017 del Obispo Presidente Curry

Que tengan una bendita Navidad, un maravilloso Año Nuevo, y salgan y hagan música en el corazón del mundo.

December 12, 2017

“Que tengan una bendita Navidad, un maravilloso Año Nuevo y salgan y hagan música en el corazón del mundo”, dijo el Obispo Presidente y Primado de la Iglesia Episcopal, Michael Curry, en su Mensaje de Navidad 2017.

Sigue el texto del mensaje del Obispo Presidente:

  Obispo Presidente Michael Curry
Mensaje de Navidad 2017
 

En la Segunda carta a los corintios, el apóstol Pablo dice:

             Si alguien está en Cristo, es una nueva creación. Lo viejo ha pasado, he aquí que ha llegado lo nuevo.

En un lugar de ese pasaje, san Pablo dice: “Dios estaba en Cristo, reconciliando el mundo consigo mismo”, y también dice en otra parte del mismo pasaje, “y se nos ha dado el ministerio de la reconciliación”.

¿Alguna vez han ido al cine o leído una historia o una novela, y la novela comienza por el final, así que ya saben dónde termina la historia, pero luego el resto de la historia o de la novela es en realidad la historia detrás de la historia? Sabemos sobre la Navidad. Sabemos sobre María. Sabemos sobre José. Sabemos sobre los ángeles que cantan Gloria en excelsis Deo. Sabemos, desde nuestra infancia, acerca de los animales en el establo. Sabemos de los magos que vienen de lejos, y llegan alrededor de Epifanía, llevando regalos de oro, incienso y mirra. Sabemos de los ángeles que cantan en los cielos y de la estrella que aparece sobre ellos. Esa es la historia.

Pero la historia detrás de la historia es de lo que san Pablo habla. Dios estaba en Cristo reconciliando el mundo consigo mismo, y Jesús nos ha dado ahora ese mismo ministerio de reconciliación. Dios estaba reconciliando el mundo consigo mismo al convertirse en uno de nosotros. Lo divino se hizo humano. Dios entró en la historia. La eternidad se convirtió en parte del tiempo. Dios estaba reconciliando el mundo consigo mismo al vivirlo él mismo. En Jesús, Dios vino a nosotros para mostrarnos el camino, para reconciliarnos con el Dios que nos creó a todos y a todo lo que existe. Y Dios también ha venido en la persona de Jesús, para mostrarnos cómo reconciliarnos unos con otros, como hijos del único Dios que es el Creador de todos nosotros. Esa es la historia detrás de Navidad.

Dios nos muestra el Camino para que nos convirtamos en hijos de Dios, y como hijos de Dios, hermanos y hermanas mutuamente. Dios nos muestra en Jesús cómo llegar a ser la familia de Dios y cómo cambiar, construir y hacer un mundo donde todos formemos parte de esa familia. Donde los niños no vayan a la cama con hambre. Donde nadie tenga que estar solo. Donde la justicia sea real para todos y donde el amor sea la ley suprema.

Sepan que hay una historia detrás de la historia, y es una historia que vale la pena cantar, dar gracias y luego vivir.

Uno de mis escritores favoritos, el difunto Howard Thurman, compuso un poema hace muchos años sobre la Navidad, y lo dice probablemente mejor que yo:
 

            Cuando la canción de los ángeles se aquieta,
            Cuando la estrella en el cielo se ha ido,
            Cuando los reyes y los príncipes están en casa,
            Cuando los pastores regresan con sus rebaños,
            Entonces comienza la tarea de Navidad:
            De encontrar a los perdidos,
            De sanar lo quebrado,
            De alimentar a los hambrientos,
            De liberar al prisionero,
            De reconstruir las naciones,
            De llevar paz a otros,
            Y, ¡hay!, de hacer música en el corazón.
 

La historia detrás de la historia es que Dios amó tanto al mundo y, por lo tanto, te ama y, por lo tanto, me ama.

Que tengan una bendita Navidad, un maravilloso Año Nuevo y salgan a hagan música en el corazón del mundo.

El Reverendísimo Michael B. Curry
Obispo Presidente y Primado

Iglesia Episcopal