In its first in-person assembly since September of 2019, The Episcopal Church House of Bishops gathered March 15-21 at Camp Allen in Navasota, Texas, for its traditional spring retreat. In addition to their primary activities of fellowship, study, prayer, and Sabbath, the 133 bishops and bishops-elect present held a business meeting the morning of March 19 that included the passage of pastoral statements/resolutions on the war in Ukraine and anti-trans legislation in various states.
The Rt. Rev. Marc Andrus, bishop of the Episcopal Diocese of California, introduced the statement on Ukraine on behalf of the Rt. Rev. Mark Edington, bishop in charge of the Convocation of Episcopal Churches in Europe, whose arrival at the gathering was delayed due to supporting churches in the region serving an influx of Ukrainian refugees.
The statement follows an Executive Council resolution from January 2022 expressing grave concern about escalating tensions between Ukraine and Russia and speaks to the current moment, identifying “a direct link between our baptismal covenant to respect the dignity of all people in Christ and the demand to respect the will of nations to determine their own destiny—the rule of jus cogens, in international law—when expressed freely in the ballot box.”
The bishops denounced Russian attacks on civilians, including “civilian residences, medical facilities, even agreed corridors for the humanitarian withdrawal of civilians in areas of combat,” and described these actions as a flagrant breach of international norms.
Turning to other recent events, the bishops acknowledged, in a pastoral statement/resolution, the context of meeting in Texas three weeks after Texas Gov. Greg Abbott called upon citizens to report parents pursuing gender-affirming medical care for their transgender children. The Rt. Rev. Kai Ryan, bishop suffragan of the Episcopal Diocese of Texas, introduced the statement, and the bishops debated at some length whether to name specific states proposing anti-trans legislation or to cast broadly in anticipation of likely future bills. The Rt. Rev. Andrew Doyle, bishop of the Episcopal Diocese of Texas, urged the group to consider the importance of naming specific instances of bigotry and mentioned the support he personally felt in recent weeks knowing The Episcopal Church stands up for the protection and inclusion of transgender people.
The bishops unanimously affirmed this perspective in their resolution, which further states: “[We] voice love and continued support for all persons who identify as transgender or non-binary and their families. We decry legislative initiatives and governmental actions targeting trans children and their families. We urge all in our church to create safe spaces and shield all people from harassment based on gender identity.”
Several bishops spoke as parents and grandparents of trans and non-binary children in affirming their support for the statement.
Heading into The Episcopal Church’s 80th General Convention in July 2022, the House of Bishops will include 39 new voting members since the 79th General Convention in 2018, and the bishops were introduced to a legislation-tracking spreadsheet tool to assist in their committee processes. The Rt. Rev. John Taylor, bishop of Los Angeles, introduced a pastoral letter in response to B003—a 2018 resolution on Jerusalem—that focuses on the hope of the holy city as well as possible new coalitions and partnerships in the region with whom the church may continue to work for peace and reconciliation.
The House of Bishops Committee on Resignations also presented and passed a proposal to re-admit the Rt. Rev. Whayne Hougland, former bishop of the dioceses of Eastern and Western Michigan, as a non-voting member of the house. The Rt. Rev. Todd Ousley, bishop for pastoral development, praised this moment of reconciliation as an example of “living into the highest ideals of our Title IV process.”
On Sunday, March 20, the House of Bishops changed gears from originally planned programming when guest speaker Pádraig Ó Tuama was unable to attend due to a personal emergency. Five bishops from the dioceses of Olympia, Maryland, Northwestern Pennsylvania and Western New York, Colombia, and South Carolina offered a variety of stories from their dioceses of the difficult, painful—but essential—work of truth and reconciliation.
Lambeth Conference, a once-a-decade gathering of bishops from across the Anglican Communion, will be held July 26 to Aug. 8 in Canterbury, and the Episcopal bishops discussed their anticipated involvement Monday, March 21, with particular attention to logistics and some discussion of objectives.
En su reunión de primavera, la Cámara de Obispos se pronuncia sobre Ucrania y los proyectos de ley contra transexuales
En su primera asamblea presencial desde septiembre de 2019, la Cámara de Obispos de la Iglesia Episcopal se reunió del 15 al 21 de marzo en Camp Allen, Navasota, Texas, para su tradicional retiro de primavera. Además de sus actividades principales de fraternidad, estudio, oración y descanso sabático, los 133 obispos y obispos electos presentes celebraron una reunión de trabajo la mañana del 19 de marzo que incluyó la aprobación de declaraciones/resoluciones pastorales sobre la guerra en Ucrania y su oposición a legislaciones contra transexuales en varios estados.
El Rvdmo. Marc Andrus, obispo de la Diócesis Episcopal de California, presentó la declaración sobre Ucrania en nombre del Rvdmo. Mark Edington, obispo a cargo de la Convocación de Iglesias Episcopales en Europa, cuyo arribo a la reunión se retrasó debido al apoyo a las iglesias de la región que atienden la afluencia de refugiados ucranianos.
La declaración sigue a una Resolución del Consejo Ejecutivo de enero de 2022 que expresa una gran preocupación por la escalada de tensiones entre Ucrania y Rusia y habla del momento actual, identificando «un vínculo directo entre nuestro pacto bautismal de respetar la dignidad de todas las personas en Cristo y la exigencia de respetar la voluntad de las naciones a determinar su propio destino —la regla de jus cogens, en el derecho internacional— cuando se expresa libremente en las urnas».
Los obispos denunciaron los ataques rusos contra civiles, incluyendo «residencias civiles, instalaciones médicas e incluso corredores acordados para la retirada humanitaria de civiles en zonas de combate», y calificaron estas acciones como una violación flagrante de las normas internacionales.
Pasando a otros acontecimientos recientes, los obispos reconocieron, en una declaración/resolución pastoral, el contexto de la reunión en Texas tres semanas después de que el gobernador de ese estado, Greg Abbott, hiciera un llamado a los ciudadanos [solo disponible en inglés] a denunciar a los padres que buscan atención médica de afirmación de género para sus hijos transexuales. La Rvdma. Kai Ryan, obispa sufragánea de la Diócesis Episcopal de Texas, presentó la declaración, y los obispos debatieron con detenimiento si nombrar estados específicos que proponen una legislación contra los transexuales o expresarse ampliamente en previsión de posibles proyectos de ley en el futuro. El Rvdmo. Andrew Doyle, obispo de la Diócesis Episcopal de Texas, instó al grupo a considerar la importancia de nombrar casos específicos de intolerancia y mencionó el apoyo que sintió personalmente en las últimas semanas al saber que la Iglesia Episcopal defiende la protección [solo disponible en inglés] y la inclusión [solo disponible en inglés] de transexuales.
Los obispos afirmaron unánimemente esta perspectiva en su resolución, que además declara: «[Nosotros] expresamos amor y apoyo continuo a todas las personas que se identifican como transexuales o no binarias y sus familias. Denunciamos las iniciativas legislativas y las acciones gubernamentales dirigidas a los niños trans y sus familias. Instamos a todos en nuestra iglesia a crear espacios seguros y proteger a todas las personas del acoso basado en la identidad de género».
Varios obispos hablaron como padres y abuelos de niños trans y no binarios al afirmar su apoyo a la declaración.
En la próxima 80.ª Convención General de la Iglesia Episcopal en julio de 2022, la Cámara de Obispos incluirá 39 nuevos miembros con derecho a voto desde la 79.ª Convención General en 2018, y se presentó a los obispos como herramienta una planilla de seguimiento legislativo para ayudar en los procesos de sus comités. El Rvdmo. John Taylor, obispo de Los Ángeles, presentó una carta pastoral en respuesta a la B003 [solo disponible en inglés] una resolución de 2018 sobre Jerusalén, que se centra en la esperanza de la Ciudad Santa, así como en posibles nuevas coaliciones y asociaciones en la región con las cuales la Iglesia puede seguir colaborando por la paz y la reconciliación.
El Comité de Renuncias de la Cámara de Obispos también presentó y aprobó una propuesta para readmitir al Rvdmo. Whayne Hougland, ex obispo de las diócesis Oriental y Occidental de Michigan, como miembro sin derecho a voto de la cámara. El Rvdmo. Todd Ousley, obispo para el desarrollo pastoral, elogió este momento de reconciliación como un ejemplo de «vivir conforme a los ideales más elevados de nuestro proceso del Título IV».
El domingo 20 de marzo, la Cámara de Obispos cambió la programación originalmente planeada cuando el orador invitado, Pádraig Ó Tuama, no pudo asistir debido a una emergencia personal. Cinco obispos de las diócesis de Olympia, Maryland, Pensilvania Nororiental, Nueva York Occidental, Colombia y Carolina del Sur compartieron una variedad de historias de sus diócesis sobre el trabajo arduo, doloroso, pero esencial, de la verdad y la reconciliación.
La Conferencia de Lambeth, una reunión de obispos de toda la Comunión Anglicana que se celebra una vez cada diez años, se llevará a cabo del 26 de julio al 8 de agosto en Cantórbery [Inglaterra], y los obispos episcopales discutieron su esperada participación el lunes 21 de marzo, poniendo especial atención en la logística y algún debate respecto a los objetivos.