Estudio Bíblico

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Estudio Bíblico: Propio 24 (A) – 2023

October 22, 2023

RCL: Éxodo 33:12-23; Salmo 99; 1 Tesalonicenses 1:1-10; Mateo 22:15-22

Éxodo 33:12-23

Anteriormente en este capítulo, aprendemos que Dios ordenó a Moisés que cerrara el campamento en el monte Sinaí y condujera a los israelitas a “la tierra donde la leche y la miel corren como el agua”, pero que Dios no iría con ellos. Moisés está ansioso y los israelitas angustiados y afligidos. Esperando en la “tienda del encuentro”, Moisés intenta negociar y hacer que Dios cambie de opinión. Necesita la seguridad de que Dios estará con él y con los israelitas durante este viaje. Dios atiende la súplica de Moisés, dándole la promesa de la presencia de Dios. Pero Moisés persiste, acercándose audazmente a Dios. Una promesa de que la presencia especial de Dios permanecerá con Israel en el camino hacia la tierra prometida no es suficiente para él. Quiere más en su relación con Dios. Está ansioso por la cercanía y la intimidad, quiere conocer a Dios de formas cada vez más profundas. “Déjame ver tu gloria”, le pide. Dios accede y decide revelar su bondad y pasar delante de Moisés. Moisés sólo podía ver la espalda de Dios, un término único que no suele utilizarse para la anatomía. Al ver detrás de Dios, Moisés puede experimentar la presencia cercana de Dios sin dejar de estar protegido.

  • ¿Qué tipo de intimidad espiritual buscas en tu vida?
  • En el pensamiento de los antiguos israelitas, el nombre de una persona representaba su carácter y su naturaleza. Que Dios conociera a alguien significaba que Dios conocía todo el ser de esa persona. ¿Qué significa que Dios conozca a Moisés por su nombre? ¿Te sientes conocido por Dios?

Salmo 99

El Salmo 99 hace uso de un lenguaje profundamente poderoso y provocador como lente a través de la cual se puede comprender y alabar mejor la santidad y la grandeza de Dios. Empieza con conceptos de soberanía, poder y dominio: “Tiemblen las naciones, y aun la tierra entera”.  Ahora bien, en nuestra época moderna, las imágenes de soberanía, estructuras de poder e imperio pueden resultar incómodas. Muchos de nosotros conocemos a los reyes y a los gobernantes hereditarios como tiranos que se niegan a ceder el poder, o como opresores imperiales que mantienen un férreo control sobre los sistemas explotadores de la sociedad. Pero en el antiguo Israel, los reyes solían considerarse figuras mesiánicas enviadas por Dios para liberar a la nación de quienes pretendían oprimirla. Con un rey fuerte llegaba la seguridad, la prosperidad económica y el florecimiento cultural. El Salmo 99 une las proclamaciones del poder de Dios con proclamaciones equivalentes de la santidad de Dios mediante atributos de justicia y rectitud. Quizá el poder y la justicia no vayan inmediatamente de la mano en nuestra mente, pero el salmista utiliza un lenguaje bien entendido para dar autoridad y credibilidad a Dios, al mismo tiempo que proclama que Dios contiene ambas cosas.

El Salmo 99 también se remonta a la historia de la comunidad documentada en otros textos de las Escrituras. Enraíza sus alabanzas poéticas en la ascendencia. Desde la referencia a Dios entronizado sobre querubines, como la tapa adornada con querubines del Arca de la Alianza, hasta el nombramiento de los principales antepasados y líderes de los antiguos hebreos, el Salmo recuerda a sus lectores que Dios se ha mostrado a su favor en el pasado y que volverá a hacerlo hoy. “¡Nuestro Dios, el Señor, es santo!”.    

  • Hay tantos nombres que se utilizan para referirse a la Divinidad: Rey, Padre, Señor, Creador, Pastor, y la lista continúa. ¿Qué lenguaje te gusta utilizar para referirte a la Divinidad y describirla?
  • ¿Por qué sería importante para el salmista conectarse con la historia y la tradición de la comunidad? ¿Qué importancia tiene la tradición en tu propia fe?

1 Tesalonicenses 1:1-10

“¡Buen trabajo, todos!” Así empieza Pablo su carta a la iglesia de paganos convertidos de Tesalónica, una importante ciudad portuaria y capital de la provincia romana de Macedonia. Pablo felicita a la comunidad por su dedicación, su fe y sus acciones frente a la persecución. No duda de que Dios actúa a través de ellos. De hecho, lo están haciendo tan bien, que Pablo se toma a broma que las regiones vecinas ¡ni siquiera necesitan que él las visite! Sus acciones como seguidores sinceros y firmes de Cristo han ilustrado el poder y la naturaleza transformadora del Evangelio. A través de sus prácticas individuales y colectivas alimentadas por la fe, su comunidad se convirtió en un ejemplo de vida cristiana.

  • ¿Cuál es el papel de la comunidad en este pasaje? ¿Cuál es el papel de la comunidad en tu propia fe y práctica?
  • Nuestras estructuras eclesiásticas y comunitarias son muy distintas hoy en día–política, social y económicamente–a las de la Iglesia primitiva. ¿Qué podemos aprender de este ejemplo de una comunidad primitiva que seguía a Cristo?

Mateo 22:15-22

“Den al emperador lo que es del emperador, y a Dios lo que es de Dios…” ¡Qué respuesta tan enigmática a una pregunta tan enigmática! A primera vista, Jesucristo parece estar dividiendo el mundo en dos partes: las cosas que pertenecen al emperador y las cosas que pertenecen a Dios. Pero no creo que sea eso lo que está haciendo. Por el contrario, está diciendo creativamente que nada pertenece al imperio. Todo le pertenece a Dios, y nuestra ciudadanía definitiva no es de este mundo. Las monedas, y por tanto el dinero en su totalidad, son una ilusión humana que no significa nada en el Reino de Dios. Jesucristo no está diciendo que hagamos las paces con la opresión. Tampoco está abogando por el alejamiento social y la rebelión abierta. En cambio, está señalando astutamente que la cuestión planteada por los fariseos y los herodianos no es la importante. Su mensaje no se centra únicamente en las cuestiones políticas de la época. Lo que Jesucristo parece hacer de manera constante a lo largo de sus enseñanzas es volver a centrar la vida cúltica y espiritual en Dios.

Al llegar a Jerusalén el día anterior, según el Evangelio de Mateo, Jesucristo volteó las mesas de los cambistas y expulsó a los vendedores del Templo. Mostró dramáticamente su disgusto por la forma en que el comercio y la explotación habían pervertido el Templo. Por eso, cuando Jesucristo se enfrenta a un interrogatorio al día siguiente, se siente frustrado porque la gente no lo entiende. Les exige a ellos, y por tanto a nosotros como lectores, que se pregunten: “¿Por qué realizamos estas prácticas rituales y seguimos estas tradiciones? ¿Para qué sirve todo esto?” No se centra en la ocupación romana, sino en volver a adorar a Dios por encima del dinero, el estatus o el poder. Las enseñanzas de Jesucristo no se limitan a este mundo transaccional que nos rodea, sino que pretenden transformarnos.

  • ¿Qué crees que significa este pasaje en nuestro contexto moderno gobernado por el nacionalismo, el capitalismo y el imperio?
  • ¿Qué poderes o influencias pueden estar compitiendo por tu atención y concentración?

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Contacto:
Rvdo. Richard Acosta R., Th.D.

Editor, Sermones que Iluminan

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