Estudio Bíblico: Cuaresma 2 (C) – 16 de marzo de 2025

LCR: Génesis 15:1-12, 17-18; Salmo 27; Filipenses 3:17-4:1; Lucas 13:31-35

Génesis 15:1-12, 17-18

Este pasaje del Génesis forma parte de la historia del origen de los pueblos de las antiguas tribus de Israel. En la antigüedad, cuando esto formaba parte de una tradición oral y luego se escribió, servía para contarle a la gente cómo llegaron a vivir y poseer la tierra. También es una historia de origen espiritual, que cuenta a los antiguos israelitas cómo llegaron a tener una relación con su Dios. Durante miles de años, esta historia ha formado parte de cómo las personas de las religiones abrahámicas han entendido los inicios de sus respectivas relaciones de alianza con Dios.

Abram estaba ansioso por saber cómo se cumpliría el futuro que Dios le había prometido. En su ansiedad, dudaba de que las bendiciones de Dios realmente le fueran concedidas. En ese momento de miedo, Dios le pidió a Abram que hiciera un sacrificio. En respuesta al sacrificio de Abram, Dios lo bendijo a él y a sus descendientes aún no nacidos. Aunque los cristianos que vivimos en Estados Unidos no tengamos una relación muy estrecha con la tierra de la que hablan las Escrituras, seguimos en la línea de las relaciones de alianza que comenzaron con Abram. Como herederos de su linaje espiritual, la promesa de misericordia de Dios se nos extiende como herencia. Y al igual que a Abram, Dios nos pide que ofrezcamos lo que más apreciamos, incluso en esos momentos de ansiedad y duda, para retribuir a quien nos lo ha dado todo, en reconocimiento de nuestra dependencia de su misericordia y gracia. Él seguirá bendiciéndonos de formas que nos resulten difíciles de imaginar o comprender.

• En este tiempo de Cuaresma, ¿qué te pide Dios que sacrifiques para que puedas ser bendecido y ser una bendición para los demás?
• En tu propia vida, cuando estabas preocupado por el futuro, ¿cómo te bendijo Dios de maneras inesperadas?

Salmo 27

En los Salmos, encontramos la expresión de casi todas las emociones humanas. En este salmo, escuchamos al autor expresar su confianza en que el Señor lo salvará de aquellos que buscan hacerle daño. Bajo esta confianza, también escuchamos el miedo de alguien que está rodeado de enemigos, alguien que vive en guerra. El salmista ha sido decepcionado o traicionado por su familia más cercana y suplica a Dios que no cambie de opinión en su momento de dificultad. Expresa su confianza en que Dios lo salvará, glorifica a Dios y le pide que esté presente para él. Aquí hay una tensión entre su fe en Dios y su miedo casi abrumador al resultado si Dios no lo salva. Parece que habla tanto para consolar su propio espíritu que tiembla dentro de él como para Dios, para recordarse a sí mismo su fe frente a su miedo.

• ¿Qué momentos de adversidad has experimentado en los que has encontrado fuerza en tu relación con Dios?
• ¿Cómo has experimentado las emociones expresadas por el salmista?

Filipenses 3:17-4:1

En esta parte de su carta, San Pablo anima a la gente de la Iglesia de Filipos a vivir una vida digna del llamamiento que han escuchado para seguir el Evangelio, el camino de Jesucristo. En otra parte de esta carta, Pablo describe el camino de la cruz como vivir con humildad, no hacer nada egoísta y, en cambio, considerar las necesidades de los demás. Aquí advierte a la iglesia que no viva como muchos a su alrededor, como esclavos de sus propios deseos por las cosas terrenales, como si « Su dios son sus propios apetitos ». Pablo bien podría estar hablándonos a nosotros, que vivimos en una cultura de consumo, donde se nos tienta sin cesar a seguir cada deseo, a anhelar más y a satisfacer esos antojos con lo que se nos ofrece. La Cuaresma, en particular, es un buen momento para reflexionar sobre si estamos viviendo como ciudadanos del Reino de Dios, conformando nuestras voluntades a la forma en que Dios nos ha enseñado a vivir a través del Evangelio de Cristo, o si nos estamos conformando a los estándares de nuestra propia cultura, donde más grande es mejor, demasiado nunca es suficiente y la acumulación de cosas materiales es el bien supremo.

• Durante esta temporada de Cuaresma, ¿cómo se está transformando tu relación con las cosas terrenales?
• ¿A qué crees que se refiere Pablo con « el ejemplo que nosotros les hemos dado a ustedes »?

Lucas 13:31-35

En esta parte del Evangelio de Lucas, escuchamos a Jesús aceptar que su ministerio profético lo llevará a su propia muerte. En este intercambio con los fariseos, sus palabras son tanto proféticas como poéticas. La gallina intenta reunir a sus polluelos bajo sus alas, mientras que el zorro busca devorar tanto a los polluelos como a la gallina. Herodes puede estar conspirando para ejecutar a Jesús, pero también está matando al pueblo de Israel a través de la opresión política y económica. Jesús sabe que se dirige a Jerusalén y, como muchos profetas antes que él, morirá a manos de los que están en el poder. Lo matarán aquellos que se niegan a escuchar el mensaje de Dios de dejar de seguir sus propios caminos, ejercer el poder injustamente, oprimir al pueblo y descuidar a los pobres, las viudas y los huérfanos. Hay quienes están en el poder y quienes se hacen cómplices al ir con ellos en lugar de cambiar para seguir al profeta.

Jesús cita el Salmo 118:26, diciendo: «y les digo que no volverán a verme hasta que llegue el tiempo en que ustedes digan: «¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!»». El Salmo 118 es un canto de victoria y salvación para aquellos que ponen su confianza en Dios en lugar de en los mortales. Es el canto de quien pide a Dios que abra las puertas de la justicia, de quien encuentra su salvación en Dios. Cita el versículo 22 en otro lugar: «La piedra que los constructores despreciaron se ha convertido en la piedra principal». Sabe que Herodes, los principales sacerdotes y los escribas lo rechazarán y lo enviarán a la cruz, pero también sabe que al tercer día terminará su obra. A través de la cruz y la resurrección, traerá la salvación a todos los que buscan la justicia de Dios.

• ¿Ha habido momentos en los que Jesús ha intentado acogerte bajo sus alas, pero tú no has querido cambiar y seguirle?
• En preparación para la Pascua, ¿cómo le estás pidiendo a Dios que abra las puertas de la justicia y la salvación en tu vida?

Matthew Sanaker es seminarista en el Seminario Bexley Seabury.

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